DIARIO EN ACUARELA

Diario en Acuarela es una colección de ilustraciones realizadas por la artista Carla Guerrero, en la cual muestra eventos de la vida cotidiana bajo una óptica muy personal, en la que confluyen el devenir diario tanto en actividades como en pensamientos.
La reflexión gira en torno a maneras de sentir  y percibir nuestra realidad como pensamientos y acciones que se entrecruzan, desdibujando las fronteras entre los hechos y los pensamientos.  Por tal razón, algunas obras pueden estar cargadas de un enorme peso de actividades diarias como el cocinar, estudiar, descansar, el tiempo de ocio  y otras por el contrario estar cargadas de imágenes oníricas,  de sensaciones como el miedo, la tristeza o desesperación ante situaciones que nos ocurren a diario.
En esta colección, se puede observar como punto central, el arquetipo femenino asociado a la sensibilidad ante su entorno inmediato, reconociéndose como creadora y poseedora del poder de transformación, a través de su acción cotidiana, bien sea de manera individual o colectiva, plasmando una amplia variedad de sensaciones en que el espectador se puede sentir reconocido.
La colección realizada por Carla Guerrero  invita a transitar por los espacios que llenos de colores y magia, nos ofrecen una visión de lo cotidiano con una perspectiva femenina, en la que los eventos que pudieran parecer carentes de magia, cobran una importancia como acción transcendental cargada de energía  en la que podemos fácilmente imaginarnos en esos lugares y llegar a sentir que son lugares comunes, que hemos pensado lo mismo, nos hemos sentido así, que hemos estado ahí.
Existe un deambular por el interior del hogar, por espacios comunes que evocan a lo privado,  a lo intimo y que van desde el cerrar la puerta del hogar, desprovista de indumentaria: a los demonios que quieren entrar; o escenas que se suscitan dentro de espacios como el  baño o el dormitorio, donde las acciones representadas nos llevan a experiencias íntimas o incluso comparativas de otro tiempo y otro lugar y como esos espacios generan acciones diferentes. En este sentido, la artista reflexiona sobre como los objetos, el entorno, las circunstancias  y el tiempo, nos movilizan a acciones diferentes. De lo íntimo, pasamos a lo público, las zonas comunes, donde compartimos los espacios. A este respecto, encontramos lugares como la panadería, el vecindario, el salón de clases, por donde transitamos diariamente, pero no son solo los lugares sino las emocionalidades que parten de estos lugares. Otra  locación presente en la colección, es el bosque y la noche, donde la autora busca representar una sensibilidad y sonoridad femenina y una vibración que comulga con la naturaleza y el poder transformador asociado al arquetipo de curandera o hechicera.